Mindfulness en un mundo digitalizado

No es novedad decir que el mundo actual es feroz y vertiginoso, más ahora con todo lo que significa atravesar una pandemia: el encierro, la sensación de vulnerabilidad laboral, y el teletrabajo le han pasado la cuenta a gran parte de la población mundial. Y es que se nos exige proactividad, atención y rapidez al tiempo que debemos calmar estas ganas de salir arrancando sin rumbo y huir de las responsabilidades.

Afortunadamente sí se puede sobrevivir en este escenario hostil. En efecto, podemos lograr el éxito a pesar de la adversidad contando con las herramientas adecuadas y aquí es donde te paso a explicar el tema de esta semana: Mindfulness o Atención Plena. Una práctica basada en una de las técnicas de meditación más antiguas de la India – Vipassana- y que consiste en la atención intencional y sin juicios, apegos o deseos de cambiar las cosas. Independiente de la meditación convencional o sesgos religiosos, y con base científica (Jon Kabat-Zinn, profesor emérito de medicina lo usó por primera vez en su programa Mindfulness-Based Stress Reduction – MBSR o Reducción del estrés basada en la atención plena en los 70’) ha sido utilizada exitosamente en áreas tan disímiles como la preparación de los militares estadounidenses antes de ser enviados a la guerra, o en pacientes con depresión mayor e incluso esquizofrenia y cáncer.

Mindfulness en la vida diaria

¿Qué es lo que podemos conseguir con esta técnica, que nos ayude en nuestra rutina? Con una práctica de solo unos minutos diarios veremos cambios considerables en nuestra concentración y aceptación de las cosas, e incluso aliviar los síntomas de depresión y ansiedad al reducir los estados emocionales negativos como el enojo y la frustración y elevar emociones positivas como la paz y alegría. A su vez, se puede orientar al tratamiento por ejemplo, la superación de adicciones y traumas; y llevado a un contexto más “cotidiano”, alcanzar objetivos puntuales.

Entonces, ¿cómo funciona?

Solo necesitas un espacio donde te puedas sentar cómodamente: puede ser un sofá, una silla o el suelo acompañándote de cojines. Aquí lo importante es que no te acuestes, ya que te puedes relajar al punto en que te duermas; respirar tranquilamente inhalando por la nariz y dejando que tu abdomen se infle y exhalar por nariz o boca; poner atención en tu respiración, para así tenerla enfocada en el momento presente (de esa forma tu sistema nervioso se equilibra) y una actitud receptiva: con el pasar de los días notarás que tu actitud frente a la vida se vuelve más ecuánime, sin juicio ante lo que pueda pasar, pero en un comienzo no será fácil dominar tus pensamientos, es por eso que es tan importante este último punto. Tal vez sientas que no te resulta o que te desconcentras más de lo que te imaginaste, pero a todos nos pasa, hasta al más experimentado. Si mantienes una actitud receptiva, te liberarás de las altas expectativas que te alejarán de tu objetivo. Lo más recomendable es que lo hagas con un instructor o instructora, ya que ellos te pueden orientar y encauzar en tu tarea. Es por eso que te dejo abierta la invitación a participar de nuestros talleres de mindfulness, e incluso a aventurarte más allá con el programa que he diseñado exclusivamente para Talento Virtual, en el que orientamos la práctica de Conciencia Plena a la búsqueda de empleo.

Marcela Music es psicóloga y Gerente en Transearch Chile. Consultora en Selección y DO. Cuenta con amplia experiencia en psicología clínica y educacional, además de contar con estudios de postgrado en meditación y Mindfulness.
Marcela Music es psicóloga y Gerente en Transearch Chile. Consultora en Selección y DO. Cuenta con amplia experiencia en psicología clínica y educacional, además de contar con estudios de postgrado en meditación y Mindfulness.

 

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