La búsqueda actual de talentos de liderazgo ejecutivo que cambien las reglas del juego se extiende mucho más allá de la búsqueda del CEO, Vicepresidente, Gerente de País o Director Gerente adecuado.
Con la presión por el rendimiento tan alta, cualquier empresa que busque un agente de cambio capaz, un innovador o un visionario excepcional debería considerar que el clima empresarial global no solo exige los mejores líderes, sino también aquellos con experiencia que inspiren a sus organizaciones a lograr grandes cosas, atrayendo equipos de alto rendimiento y la construcción de redes superiores de pares y de la industria.
Existe una nueva química del éxito organizacional, y su génesis radica en el reconocimiento de que, como individuos, solo podemos lograr mucho, pero como líderes, catalizadores y estimuladores de grandes conexiones y relaciones con empleados, clientes y personas influyentes de la industria por igual, grandes y grandes. las cosas audaces pueden tomar vuelo.
De hecho, cuanto antes nos deshagamos del mítico ‘Sobrehumano’, más rápido podrán pasar muchas de nuestras empresas a lo que es realmente importante. Y eso es reconocer que necesitamos líderes de gestión ejecutiva capaces de avivar las llamas de la innovación, el desempeño humano y la visión estratégica y alinearlos constantemente para obtener y mantener una ventaja competitiva.
La tarea de renovar nuestras organizaciones, por lo tanto, se trata mucho más de elegir líderes y los equipos y redes a los que pueden acceder y mucho menos de poner nuestras esperanzas, y las de los accionistas, en la capacidad de un solo líder para ganar participación de mercado, aumentar las ventas y mejorar. rentabilidad.
Por supuesto, los mejores líderes ya saben lo vital que es contar con las personas adecuadas a bordo y avivar continuamente sus redes personales y profesionales para salir adelante. Esto requiere un sentido de humildad y la voluntad de aceptar que las mejores respuestas a un problema empresarial delicado pueden residir en la cabeza de otra persona o literalmente fuera de las paredes de la organización.
Por lo tanto, la próxima vez que entreviste a un líder potencial clave para su empresa, no se limite a preguntar qué ha hecho. En su lugar, explore más profundamente cómo sus decisiones sobre las personas y sus actividades de networking y compromiso están magnificando y multiplicando lo que solo ellos pueden aportar a su mesa.